«Es culpa de Maduro»: generar la crisis para ganar elecciones
Una frase abre la semana en muchos titulares de medios del país, se trata de una frase de Julio Borges que, pese a lo vaga y corta, es reveladora y contundente: «Por crisis económica no vamos a ganar en Parlamentarias», reveló desde Globovisión. Las lecturas sobre esta frase son muchas, pero para quienes entendemos que la guerra económica es una estrategia política, la frase es una confesión. Es una confesión de que están detrás de la jugada y que no les va a funcionar como suponían.
A la luz de que la derecha tiene claro que su opción política se basa en el «éxito» de la guerra económica contra el pueblo, la gestión de lo que sucede es engañosa.
El «negocio redondo» del contrabando
- El contrabando no es espontáneo. Obedece al valor (artificial) de las monedas impuesto por las casas de cambio que tranzan bolívar-peso-dólar. Con dólar paralelo muy bajo no hay contrabando que tenga sentido. Esto es teledirigido, no obedece a algún patrón económico fiable. Es paraeconomía, básicamente. Si esto sucede del lado colombiano, para la mediática esto no existe, lo que sucede es por «culpa de Maduro».
- El contrabando genera desabastecimiento fronterizo, luego, para abastecer la frontera con Colombia, las cadenas de suministro apuntan más productos a los estados fronterizos (reproduciendo el círculo), desabasteciendo parcialmente el centro y oriente del país o limitando ciertas capacidades en anaqueles. Venezuela siempre ha tenido una producción limitada de muchos bienes. Más limitada es, todavía, la importación coyuntural (que se produce para suplir inventarios), en tiempos de un muy bajo precio del petróleo. Ningún político opositor explicará eso en público por ser esclarecedor de lo que sucede. Ellos sólo diran que «es culpa de Maduro».
- Las mafias del paralelo suben exponencialmente el «valor» del dólar con respecto al bolívar, pues las ganancias del contrabando yacen en la relación de cambio bolívar-peso-dólar en Cúcuta. Con esto incrementan el «beneficio del negocio» del contrabando. Pero claro, sobre esto no hay investigación periodística, ni mediática, esto no es guerra económica, para ellos es «culpa de Maduro». Colocar la realidad de la guerra económica como «un invento de los chavistas para tapar su incompetencia» es una jugada rastrera, baja, miserable.
- La corruptela en el «supernegocio» del contrabando no es mera corruptela. Se tratan de verdaderas mafias que «por las buenas o por las malas» compran lo que sea, o a quien sea, en la frontera, sea Guardia Nacional, fiscal de la Sundde o apóstol del mismo Jesucristo. «Recibe los reales o estás muerto» es una frase común en la frontera. Quienes desde nuestra Fuerza Armada dan duros golpes a este flagelo, deben hacerlo a rostro tapado y deben rodearse de duros anillos de seguridad. Se está lidiando es contra mafias, no contra vendedores regateadores de artesanía en una placita. Dicen los opositores que la acción desestabilizadora de estas mafias seguramente es «culpa de Maduro»; la mafia paraca de Cúcuta para ellos no tiene nada que ver. Las culpas opositoras van directo al Gobierno, a un guardia, o a Diosdado. No se profundiza en esto. Barren y tiran todo debajo de la alfombra.
- Los gendarmes del megacontrabando y el megacaparamiento son actores privados que sacan la mayor tajada de una coyuntura de desabastecimiento que ellos mismos ayudan a generar. Sus ganancias son exponenciales y extraordinarias. Son pranes que no se conformaron (como en cualquier país «normal» del mundo) a una ganancia tabulada y ventajosa del 30% por mercadear productos que sólo distribuyen. La politiquería escuálida dice que todo es culpa del «control de precios», que es culpa del Gobierno. Dicen que es más «rentable» el contrabando por culpa de los controles. Que los controles «desestimulan» vender aquí lo que se produce o se importa para que se venda aquí. Dicen que lo que hacen los pranes no lo hacen por ambición, ni para sabotear la economía, lo hacen «por culpa de Maduro».
Para ellos todo «es culpa de Maduro»
El ataque de Dolar Today
- Venezuela ha dado desde su teta petrolera el alimento y la vida a una burguesía parásita especializada sólo en la captación de la renta y sus divisas (nuestras divisas, las del pueblo). Dado que tal adefesio económico es hoy una actividad ilegal y repudiable, estos pranes de la seudoeconomía adquieren la variante de mercaderes ilegales, mafiosos. Operan desde fuera del país y camuflados dentro de éste. La diáspora corrupta y malandra no existe para la MUD. Nunca los nombran. Para ellos todo «es culpa de Maduro».
- Dolar Today fija las tasas con los mercaderes de Cúcuta, y allí van los revendedores venezolanos que obtuvieron los dólares por diversas vías violando la ley. Luego los de Miami cobran su tajada. El silencio de los «economistas» opositores es ensordecedor. Para ellos esta corruptela no existe. Ningún lider opositor la califica como daño para el país. Si estos señores deciden expoliar la economía entera, ningún adeco lo dice. Sólo dicen que «es por culpa de Maduro» y no hay una lectura amplia y sincera de los agentes dañinos de la economía nacional.
- El precio inducido del dólar paralelo, dada la conjugación de mafias de Miami a Cúcuta que fijan tasas absurdas, es, además de un certero ataque certero a la economía venezolana y a nuestros sietemas de precios, un negocio extremadamente jugoso y redondo. Se trata de un negocio articulado y ordenado para así captar la renta en divisas expoliadas desde Venezuela. Sustraen por medio de diversos mecanismos lo que por vías legales (libre cambio) no pueden sustraer. Esto, dicen que es por «culpa de Maduro». Atacan al control de cambio. Los opositores que dicen que «se llevaron las divisas» no hablan de quienes se las siguen levando: los parásitos.
- El precio del paralelo enrarece y destruye todos los sistemas de precios. La economía real comenzó a sufrir estragos que hacen todas las cuentas inmanejables. El saliente jefe de Fedecámaras, la Asociación Bancaria, opinadores y algunas casas de bolsa se han pronunciado en contra de la fijación artificial del precio del paralelo. Mediáticamente eso no existe. Lo ocultan. Ningún opositor dice esto. Nadie se pronuncia por la empresa privada pequeña y mediana que sufre por eso, y deberían hacerlo por ser los gendarmes del capitalismo. Dicen más bien que esto «es culpa de Maduro» y nada más.
La gestión mediática del desabastecimiento y las colas
Fue Datanálisis la que realizó un estudio para la cadena Farmatodo, estimando que siete de cada diez personas en una cola son bachaqueros. Pero la mediática coloca a los bachaqueros (quienes están en las colas a millares) como «familias víctimas del desabastecimiento que sufren en las colas». Básicamente «es culpa de Maduro», señalan. A las colas van también compradores nerviosos, acaparadores domésticos y gente que de verdad necesita tales bienes, pero qué va. Toda persona en cola debe endosársele al Gobierno.
15 días antes de que un producto desaparezca es mencionado en la prensa. La gente al ver la noticia corre a comprar, acelerando el desabastecimiento. Otra cosa cierta es que ellos hablan de «escasez”, la cual dicen que «es culpa de Maduro». Si un producto estuviera verdaderamente escaso no estaría amontonado en el tarantín o en la casa de un bachaquero. Pero estamos en guerra económica y, como en toda guerra, la primera violada es la verdad.
La gestión mediática más engañosa es la de las redes sociales, medios digitales y afines. Colocan como realidad exponencial alguna trifulca en una cola, o alguna situación bochornosa de la gente en las colas, anaqueles vacíos y similares. Destruyen toda argumentación, todo análisis, toda explicación del desabastecimento. La imagen dice esto «es culpa de Maduro» y nada más. No hay explicaciones a eso, ni actores involucrados. La propaganda digital es perniciosa y neurotizante.
La politiquería va acompasada de la mediática. Hay candidatos a diputados ofreciendo soluciones desde un (ansiado) curul en la Asamblea Nacional (que no han ganado) para «solucionar los males del país». Es decir, se quieren elegir a diputados y le hacen creer a la gente que van a elegir a un ministro de economía. Demagogia, sacar partido politiquero de la situación, se llama a eso. La idea es decir que todo «es culpa de Maduro». Tratan a su propia gente como mediocres consumidores de labias baratas.
Capriles hablando de economía, Leopoldo hablando de economía, Dolar Today publicando artículos de economía, articulistas de El Universal hablando de economía y explicando que el precio del paralelo es «culpa de Maduro». En fin. Es una comparsa bastante sospechosa.
*misionverdad.com